Las claves que te ayudarán a conseguirlo.

No procrastinar era y es mi objetivo de esta semana (y al final te cuento si lo voy a mantener toda la vida). Lo he hablado con muchas de vosotras y estamos todas en el mismo bando: procrastinando sin remedio.

Según la Wikipedia la procrastinación es el hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables por miedo a afrontarlas y/o pereza a realizarlas.

SEGURO que se te han venido a la cabeza todas esas cosas que aplazas para después.

Pues sin más pasemos a la acción, te he dejado una plantilla para que la copies o te la descargues y la completes con toda la sinceridad del mundo. Será el primer paso para dejar de procrastinar, el punto de partida. Y si te interesa el tema, no pienses: “Ya lo haré”. Hazlo ya.

Si no te haces estas preguntas, vas a seguir posponiendo cosas que te importan sin saber exactamente porqué y lo que es peor, hacerlo así te alejará muchísimo de lo que realmente quieres de ti y de la vida, tus objetivos, tus metas, tus sueños.

Hay una regla, que llaman la de los dos minutos que nos dice que todo aquello que podamos hacer en menos de dos minutos, MEJOR ES HACERLO que planificarlo o dejarlo para después. Piensa en cuantas cosas que te llevan menos de dos minutos haces a lo largo del día, imagina hacerlas una detrás de otra, y luego imagina escribirlas todas en un papel: Te sorprenderían todas las tareas que completarías en una sola hora y alucinarías al verlas escritas, porque ni siquiera somos conscientes de lo productivas que somos cuando nos ponemos.

Para esto último también tengo un descargable gratuito que nos ayuda a ser consciente de las miles de cosas/tareas invisibles o no tanto que hacemos a lo largo de un día.

Para mí hay dos tipos de procrastinación: La de la pereza y la del miedo.

La de la pereza está claramente identificada con tareas del hogar, obligaciones o trámites burócraticos que nos desesperan.

Cómo dejar de procrastinar y vencer la pereza:

La única manera real es probando y llevando a la práctica alguna de estas tácticas.

  1. Anota en un papel todas las tareas que te dan pereza. Identifica la prioridad que tiene cada una (si te apetece ponle colores, porque hacerlo bonito nos ayuda).
  2. Al lado, calcula cuanto tiempo te lleva cada tarea. Ya sabes, si muchas de ellas son menos de 5 minutos, aplica la regla de los dos minutos y ponte a ello. Menuda CARGA MENTAL que te quitas.
  3. Planifica el resto: Por ejemplo: Todas las tareas burocráticas que odio las voy a agendar para el lunes por la mañana y así no me amargarán toda la semana y los trámites quedarán hechos y yo feliz. Las tareas del hogar que son infinitas pero puedo acotar 3 como urgentes, las agendo hoy mismo y le dedicaré 2 horas a piñon y lo mismo hago más cosas, ya puestas…
  4. PIENSA en la satisfacción de haber hecho todo lo que te has propuesto. Y date el lujo de experimentarlo. Nada de lo que te cuento es nuevo, lo habrás leído mil veces, pero si solo lo lees y dices “ya lo haré” no sabrás si funciona. Y te aseguro que sí.
  5. Fuera móvil (o tu distracción favorita), solo permitido al principio para ponerte música o un podcast. Las notificaciones LUEGO, cuando acabes.

Cómo dejar de procrastinar y vencer el miedo:

Esto es justo lo que me ha pasado a mí, llevaba meses dilatando dos proyectos muy importantes y procrastinaba todo el rato. Incluso cuando conseguía sacar tiempo de calidad y los planetas se alineaban, me sorprendía a mi misma perdiendo el tiempo con el móvil (o tendiendo lavadoras que pueden esperar a mañana si hace falta) y no avanzando en aquello que tanto deseo (porque lo primero es saber si eso en lo que no estás enfocando es algo que amas de verdad o realmente no le dedicas tiempo porque no quieres hacerlo, y yo lo tenía claro).

Para saber esto te ayudará muchísimo la primera plantilla que te animo a que la completes.

Para vencer el miedo y dejar de procrastinar puedes/debes hacer lo siguiente:

  1. Tener muy claro qué es eso que no quieres dejar más. ESCRÍBELO.
  2. Analiza el miedo: No he querido hacerlo por miedo a fracasar, a las críticas, a no tener suficiente formación, a no valer para ello, a que no me de tiempo, a no saber hacerlo…Será de gran ayuda que seas muy sincera contigo misma y que detalles todo lo que te esté impidiendo avanzar y por eso hayas procrastinado.
  3. Háblalo con una persona importante para ti: Hacerlo te dará claridad mental y la posibilidad de ver desde otra perspectiva que los miedos que te estaban frenando no tenían tanto fundamento como creías. Por ejemplo: Hacer una formación que te encanta, y no meterle mano porque no te ves capaz ni de hacerla ni de finalmente dedicarte a ello porque hay pocas posibilidades laborales y mucha competencia. Hablar de ello con esa persona que sabes que te entiende y sobre todo que te conoce, te hará comprender que si has empezado con esa meta es porque realmente amas esa materia y que el miedo a fracasar va casi de la mano con el proceso pero que en ningún caso eres menos válida o menos capaz de ganarte la vida con ello. Procrastinar no es otra cosa que perder el tiempo.
  4. Igual de importante es organizar tu tiempo. Como en el colegio necesitas un horario, saber qué tiempo, qué días y qué horas vas a dedicarte a esto a full y justo en esos momentos, como en el colegio, no hay opción de procrastinar. No hay distracciones ni móvil que valga. ¿Qué vas a sentir si haces esto? FELICIDAD, PLENITUD Y SATISFACCIÓN porque vas a comprobar que…si te pones avanzas y que si quieres puedes, pero tienes que querer.
  5. Aunque lo ames, este proyecto es más grande que tu y te está costando gestionarlo. Como he leído alguna vez, ¿Cómo te comerías un elefante? Poco a poco. Después de haber plasmado en papel un horario y un tiempo semanal a este proyecto que te va a obligar a romper el hielo y dejar de procrastinar, toca desmenuzar tu proyecto en tareas o actividades que te sean asumibles y te permitan avanzar a buen ritmo sin que te suponga demasiado esfuerzo como para tener la tentación de abandonar/procrastinar.Que de un vistazo puedas ver en un planner todas las acciones que tienes que llevar a cabo para CONSEGUIRLO va a hacer que tu mente vea el final y lo vea alcanzable. Y esto te ayudará a conseguirlo, porque las fechas hacen magia, nos ponen a trabajar. Enero: Terminar temario. Lunes: de 21.00 a 22.00 – Resumen tema X. Miércoles: de 21.00 a 22.00 – Test. Sábados…Febrero: Empezar prácticas.….Marzo: El proyecto.….
  6. Recompénsate. Aunque lo ames, necesitas motivación y las recompensan hacen mucho bien. Elige 5 recompensas que sean realistas, factibles y motivadoras y asignatelas cuando cumplas algún hito. (Por ejemplo: No procrastinar en todo el día, no procrastinar en toda la semana, no procrastinar en 21 días…)

Procrastinar NO NOS HACE FELICES, nos hace perder el tiempo de la vida que hemos venido a exprimir y yo quiero seguir cumpliendo sueños.

Por eso, mi decisión sigue siendo firme y NO PROCRASTINO MÁS.

Es precisamente la posibilidad de realizar un sueño lo que hace la vida interesante.

El Alquimista, Paulo Coelho.